Bríndales a tus hijos el mejor comienzo para prevenir enfermedades de por vida: La importancia de los primeros 1000 días

Por:

Mtra. Esther Schiffman Selechnik
Nutrióloga y Especialista en Obesidad
@nutriologaesthers

¿Si quieres conocer estrategias puntuales para prevenir la obesidad y otras enfermedades crónicas en tus hijos? Este texto es para ti…

Antes de empezar con este tema tan importante, me gustaría presentarme ya que tengo el honor de ser una de las columnistas de este maravilloso blog de Ludi el Pirata y me gustaría formar con ustedes una comunidad que día con día logre dar pequeños pasos hacia un estilo de vida cada vez más saludable. Como especialista en obesidad, estoy convencida que los buenos hábitos alimenticios y un estilo de vida saludable, son la clave para prevenir todas las enfermedades que nos aquejan hoy en día, por lo que, en estos últimos 18 años, mi pasión se ha centrado en transmitir información de nutrición basada en evidencia científica (tanto en consulta privada como en la universidad y en los medios de comunicación), para ayudar a las personas que quieren cuidar su cuerpo y el de su familia a tomar decisiones informadas, inteligentes y que no pongan en riesgo su salud. Agradezco a Ludi el Pirata esta gran oportunidad y los invito a acompañarme en esta aventura que hoy inicia con la importancia de la nutrición los primeros 1000 días del bebé, que será la clave para aumentar o disminuir el riesgo de enfermedades de la persona en las siguientes etapas de su vida.

Como padres de familia, nuestra principal preocupación es ayudar a nuestros hijos a desarrollarse al máximo de su potencial y a prevenir todo tipo de enfermedades. Esto para muchos podría parecer difícil y podrían pensar que será una pelea constante por hacer que sus hijos coman frutas y verduras o no coman tantos dulces; sin embargo, no es así. Ahora se sabe, que existen algunas estrategias que, si se logran hacer los primeros 1000 días de vida del bebé, tendrán un impacto protector para toda su vida.

Esta etapa de los 1000 días se divide en tres periodos y en cada uno de ellos se pueden tomar decisiones que tendrán un efecto muy positivo en la salud de la madre, el hijo y de la familia en general:

  1. Etapa prenatal (0 a 280 días). - En esta etapa, se debe tener cuidado en 3 situaciones:
    • Comenzar el embarazo con un peso saludable: Además de que lograr el embarazo, se facilita; cuando la pareja tiene un peso saludable (Índice de Masa Corporal o IMC de 18.5 a 24.9), es ideal a empezar un embarazo con sobrepeso u obesidad que aumenta el riesgo hasta 3 veces, de que los hijos presenten obesidad en alguna época de la vida[1].
    • Ganar peso moderado durante el embarazo: Embarazarse no quiere decir comer por dos ya que comer en exceso provocará una mayor acumulación de grasa corporal en la madre que aumentará su riesgo de diabetes gestacional, preclampsia (hipertensión en el embarazo) y otras complicaciones en el parto, así como aumentará el riesgo del niño de nacer con sobrepeso. Tampoco quiere decir que hay que hacer una dieta muy restrictiva, ya que esto incrementará el riesgo de que el bebé nazca con bajo peso y/o que la mamá presente problemas de malnutrición como osteoporosis o anemia, entre otras. Un bebé que pese menos de 2.5 kg o pese más de 4 kg al nacer, tendrá más riesgo de tener obesidad y/o diabetes en la adolescencia[2].
    • Tener una dieta saludable y variada en el embarazo: A mayor variedad de sabores y menor cantidad de alimentos dulces o ultra procesados durante el embarazo, el bebé aceptará más fácilmente una gran variedad de alimentos durante la alimentación complementaria (menos riesgo de ser un “picky eater”) y tendrá una menor afinidad por alimentos dulces. Recuerda que el bebé recibirá todos esos sabores a través de la placenta y podría desarrollar un cierto tipo de adicción al azúcar desde estas etapas[3].
  2. Etapa de lactancia materna / fórmula (280 días a 6 meses de edad). – La leche materna es el mejor alimento que puede y debe ofrecerse a un bebé para prevenir obesidad y enfermedades crónicas a largo plazo ya que es una leche totalmente higiénica que se va adaptando a las necesidades del bebé conforme va creciendo. Se recomienda dar lactancia exclusiva por 6 meses y seguir ofreciendo leche materna hasta los 2 años de edad, así es que busca espacios seguros, grupos de apoyo y personas pro-lactancia, para que te apoyen en este proceso que a veces requiere de buenos tips para que sea exitoso. Esto es muy importante, porque se ha encontrado que las leches de fórmula contienen una menor cantidad de grasas saludables y una mayor cantidad de energía y proteína que la leche materna, lo que ya se sabe aumenta el riesgo del bebé de tener obesidad en la adolescencia[4]. Es importante mencionar que el nacimiento por vía vaginal y no por cesárea, facilita la lactancia exitosa y además ofrece al bebé las bacterias saludables que fortalecerán su sistema inmunológico para toda la vida[5], así es que dejemos este milagro de la medicina moderna, únicamente para esas ocasiones en las que se necesita salvar una vida, pero dejemos de promover a esta cirugía por comodidad o por moda (México ocupa el primer lugar mundial en cesáreas programadas NO NECESARIAS).
  3. Etapa de la alimentación complementaria (6 meses a 2 años). – La alimentación complementaria es ese momento en el que introducimos alimentos sólidos a la dieta del niño para complementar a la leche materna y es importante saber que, si el niño está creciendo adecuadamente, no debe hacerse antes de los 6 meses ya que esto aumenta su riesgo de padecer obesidad en etapas posteriores[6]. Además, incrementa su riesgo de ser melindroso con los alimentos al ingerir alimentos cuando su sistema digestivo no estaba maduro para ello. Otra regla importante para la alimentación complementaria es que, una vez que se inicia a los 6 meses, es importante introducir una gran variedad de alimentos y ofrecer distintas texturas lo antes posible (ya no empezar con verdura y hacer una transición gradual, sino que iniciar con verduras, proteínas, cereales y frutas lo más rápido posible), ya que hacer papillas demasiado molidas y poco variadas por varios meses, provocará rechazos posteriores a alimentos mezclados o con pedacitos o con diferentes texturas[7].

Así es que ahora sabemos que los primeros 1000 días de vida son una ventana de oportunidad para mejorar la calidad de vida de la sociedad en general y es por ello que los invito a practicar y promover estas simples acciones:

  • Peso saludable durante la edad reproductiva
  • Adecuada ganancia de peso durante el embarazo
  • Evitar consumir alimentos azucarados y/o ultraprocesados durante el embarazo y en la infancia
  • Lactancia materna exclusiva por 6 meses
  • Evitar fórmulas altas en proteína
  • Introducción de alimentos sólidos hasta los 6 meses
  • Promover la variedad de alimentos, sabores y texturas en etapas tempranas
  • Cambiar a leche de vaca hasta el año de edad.

*Les dejo esta reflexión que puede aplicarse siempre: Los adultos deciden lo que ofrecen a los niños de comer y buscan que su alimentación sea lo más saludable posible pero los niños deciden si comen o no comen y deciden la cantidad de alimento que van a consumir.

NO FORZAR, NO PREMIAR, NO PELEAR.

Cuídense mucho y nos vemos en la siguiente columna.

 

 

[1] Yu, Z.; Han, S.; Zhu, J.; Sun, X.; Ji, C.; Guo, X. Pre-Pregnancy Body Mass Index in Relation to Infant Birth Weight and Offspring Overweight/Obesity: A Systematic Review and Meta-Analysis. PLoS ONE 2013, 8, e61627.

[2] Gaillard, R.; Welten, M.; Oddy, W.H.; Beilin, L.J.; Mori, T.A.; Jaddoe, V.; Huang, R.-C. Associations of maternal prepregnancy body mass index and gestational weight gain with cardio-metabolic risk factors in adolescent offspring: A prospective cohort study. BJOG Int. J. Obstet. Gynaecol. 2015, 123, 207–216.

[3] Gillman, M.W.; Ludwig, D.S. How early should obesity prevention start? N. Engl. J. Med. 2013, 369, 2173–2175.

[4] Escribano, J.; Luque, V.; Ferre, N.; Mendez-Riera, G.; Koletzko, B.; Grote, V.; Demmelmair, H.; Bluck, L.; Wright, A.; Closa-Monasterolo, R.; et al. Effect of protein intake and weight gain velocity on body fat mass at 6 months of age: The EU Childhood Obesity Programme. Int. J. Obes. 2012, 36, 548–553.

[5] Koleva, P.; Bridgman, S.; Kozyrskyj, A. The Infant Gut Microbiome: Evidence for Obesity Risk and Dietary Intervention. Nutrients 2015, 7, 2237–2260

[6] Edwards, C.A.; Parrett, A.M. Intestinal flora during the first months of life: New perspectives. Br. J. Nutr. 2002, 88 (Suppl. S1), S11–S18. [

[7] Scaglioni, S.; Agostoni, C.; Notaris, R.D.; Radaelli, G.; Radice, N.; Valenti, M.; Giovannini, M.; Riva, E. Early macronutrient intake and overweight at five years of age. Int. J. Obes. Relat. Metab. Disord. 2000, 24, 777–781.

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