La Tecnología contribuye a grandes propósitos, uno de ellos: La educación

July 6, 2021 Felipe Rosales 0 Comments

Por: MBA Felipe Rosales

Especialista en nuevas tecnologías de impresión 3D

Director General de MakerBot LATAM

Linkedin: Felipe Rosales

Muchos hablan de los riesgos que puede tener el uso de la tecnología, pero yo considero que hoy en día lo riesgoso es no utilizar nuevas tecnologías y sobre todo no implementarlas en la educación. 

Si en todos los ámbitos de nuestra vida la tecnología está presente, por ejemplo; en las telecomunicaciones, en la forma de pedir comida, de ir al banco e incluso de ir al supermercado, entonces queda de manifiesto que la tecnología incide directamente en la forma en la que llevamos nuestra vida. La tecnología fue creada con un propósito y este propósito es claro: ayudar a la humanidad a hacer tareas repetitivas mucho más sencillas. El propósito de la educación no es memorizar, aprender fechas o hechos históricos, sino formarte un pensamiento crítico el cual fomente un gusto genuino por aprender, por criticar lo establecido y empujarte a buscar las respuestas por ti mismo. Los profesores actualmente  solo transmiten conocimientos, pero pocos son los que te retan a pensar fuera de la caja. Aquí es donde entra la tecnología, pues si un profesor no te reta y no consigue motivarte para que puedas seguir aprendiendo, entonces esa respuesta debe venir de la utilización de la tecnología.

Algo que nos enseñó la pandemia fue que no todas las personas estaban listas para hacer home office, ni mucho menos que los alumnos pudieran tomar clases a distancia; no necesariamente porque no pudieran aprender, sino porque muchos de los planes curriculares de las escuelas no estaban adaptados para la educación a distancia. A más de un año de que inició la pandemia, pudimos constatar que hay muchas personas autodidactas y con autogestión para poder cumplir tiempos y horarios; sin embargo, muchas otras personas carecen de estas aptitudes. Las TICs ciertamente ayudaron a un sector de la población que tuvo acceso, no solo a internet de buena calidad, sino a dispositivos electrónicos y también a un espacio en el que pudieran tomar sus clases. Más que las TICs, las variables anteriormente mencionadas fueron las que desde mi perspectiva, contribuyeron a mejorar la productividad de los alumnos y de aquellos profesionistas que hicieron home office.

El desafío más grande que yo veo para las empresas de tecnología es la clara desconexión entre el mundo académico y la industria, cualquiera que esta sea, asimismo el reto es romper con lo establecido, romper con esa estructura de pensamiento en la cual no hay necesidad de cambiar procesos, procedimientos, formas de trabajar e incluso ahora esforzarse parece que está mal visto. Aquellas personas diferentes o que hacen más que el promedio son parias dentro de los trabajos o de las escuelas y eso es un grave síntoma de los tiempos que estamos viviendo. Estamos acostumbrados a hacer más con menos, pero al parecer se nos olvida que lo anterior solo aplica con los recursos externos, más no es así con el conocimiento. En este rubro mientras más conocimiento que puedas aplicar y compartir será mucho mejor, no solo para ti en lo indivudual, sino en lo colectivo, para la sociedad en la que vives o la comunidad en la que contribuyes.  

La diferencia que hoy puedo ver en escuelas que implementan nuevas tecnologías  es abismal a las que aún no se atreven, es el día y la noche, pues no se trata solamente de incluir tecnología dentro del aula o hacer proyectos STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, artes y matemáticas por sus siglas en inglés), realmente se trata de la filosofía que tienen los directivos y personal para atraer a aquellos alumnos que estuvieron más de un año tomando clases en línea y validar ¿Cuál es su propuesta de valor para mantener no sólo el mismo nivel de matrícula, sino de tener interesados a los alumnos? 

La principal habilidad que deben desarrollar los profesores para impartir enseñanza de nuevas tecnologías es el gusto por aprender y ser autodidactas. Si bien, existe mucha documentación en línea para que aquellos profesores que quieran empezar con esta odisea de impresión 3D, puedan aprender; también poseemos libros y certificaciones para alumnos y profesores que ayudan a que la adopción de esta tecnología, que aún se puede considerar como disruptiva y emergente, sea más rápida, indolora y transparente. Sólo falta que nos dejen ayudarlos, no se tiene que inventar el hilo negro ni la rueda; más bien se trata de utilizar los elementos existentes en beneficio propio.

Conoce más sobre cómo la tecnología, con el uso adecuado y contenidos aptos, puede mejorar la situación de los niños.